Propósito es a lo que entregas tu vida. Es eso a lo que le estás dando todo de ti.
No creemos que exista gente sin propósito. Lo que hay es gente que se entrega por completo a propósitos inertes, inconscientes, insuficientes para su verdadero potencial.
Es probable que tu verdadero propósito de vivir comande tus actos sin que lo notes. Esa ignorancia te hace sufrir porque presientes que estás desperdiciando tu vida en algo que ya no quieres ser.
Vivimos en medio de una crisis de propósito. El ser humano de hoy es más consciente de que puede tener una vida más significativa de la que tiene.
Con buenas intenciones, la auto-ayuda tradicional nos llama a escribir nuestro enunciado de misión y pegarlo en la pared. Ignorando una fatal verdad:
No podrás llegar a
ningún lado sin saber dónde diablos estás parado.
Por eso hoy
te decimos que en lugar de escribir basuras cliché como “Quiero ser el cambio que este mundo necesita” date unos cuantos
bofetones en la cara y saca del abismo tu verdadera misión de vida: “Mi propósito en esta vida es victimizarme ante los problemas que se me presentan”
“Mi misión es hacer muchos millones de dólares para demostrarle a esos imbéciles de lo que soy capaz.”
“Mi propósito en esta vida es ordeñar el sistema lo más que pueda para poder satisfacer mi alma de vividor.”
“Mi objetivo más importante es cobrar el cheque de la quincena para poder pagar la televisión satelital y ver la serie Two and a Half Men todos los martes.”
“Sacrifico mi felicidad para hacer felices a mis hijos, y con eso me hago miserable y satisfago mi mediocridad.”
“Mi propósito es trabajar como estúpida haciendo millonarios a unos arrogantes de Wall Street para así satisfacer los deseos de pertenecer a mi tribu de yuppies.”
“Vivo para rebelarme a todo lo establecido. Mi indignación es una máscara que oculta mi pavor a no ser querida por mi papá.”
"Invierto mi vida en demostrar que soy más listo y espiritual que los demás. Ese auto-engaño me permite seguir mi mediocre existencia."
Por un momento pensarás que estoy juzgando estos propósitos como malos, mediocres o absurdos.
En realidad no.
La verdad es que prefiero a alguien vividor que acepta conscientemente que ese es su propósito a un pseudo-intelectual que se engaña a sí mismo con objetivos plagiados o con quasi-filosofías cobardes.
¿Y que sigue ahora que sabes que primero debes desenterrar tu verdadero sentido de vivir?
Vamos despacio. Primero saca las pelotas para poder ponerle un punto de partida al mapa de tu vida.
Luego sacamos la fucking brújula.
Somos Gente Transformándose.
Suscríbete a ComoDiablos.Net